Alertado por el alto nivel de fuga de capitales, el Gobierno puso la lupa en el sector turístico. En un nuevo paso para disminuír la salida de dólares, ahora decidió prohibir la venta de pasajes y paquetes turísticos al exterior a no residentes.
La orden no escrita partió de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y del Banco Central. Ocurre que en los últimos meses el organismo recaudador detectó un fuerte crecimiento en contrataciones turísticas en la Argentina por parte de extranjeros.
El motivo de esta tendencia es que como se pagan en pesos al tipo de cambio oficial, las compras de pasajes y de paquetes resultan mucho más baratos medidas en dólares que en los países de origen. «Cada vez se nota más uruguayos o chilenos comprando paquetes, directamente con pesos o incluso con tarjetas locales«, explicaron al matutino Ámbito Financiero.
Esta práctica acelera la fuga de capitales, ya que se multiplica el número de pasajeros que viajan al exterior. Se detectó además otro «modus operandi» de las agencias de turismo: triangulan con agencias del exterior la compra de paquetes para sus clientes, que en vez de comprarse en los países de origen se contratan en la Argentina.
La posibilidad de comprar paquetes al tipo de cambio oficial a $5,05 cuando el paralelo supera los $8, es decir una brecha superior al 55%, genera fuertes distorsiones en el mercado. Por lo tanto, no sólo se multiplicó la demanda de servicios turísticos de argentinos, sino que también representaba un fuerte incentivo para extranjeros.
Las agencias de turismo se enteraron en los últimos días sobre esta nueva prohibición. La AFIP ya se encargó de informarles que en el caso de compra de paquetes turísticos de no residentes no autorizará el giro de divisas al exterior.
Desde octubre, la AFIP exige a las agencias permiso para el giro de divisas, previa presentación de una Declaración Jurada Anticipada de Servicios (DJAS). Básicamente, las compañías deben presentar la factura de la contratación del hotel, el alquiler de autos, las excursiones o cualquier otro servicio contratado por el turista desde la Argentina.
Pero a partir de la semana pasada el organismo que dirige Ricardo Echegaray agregó un nuevo requisito: antes de autorizar el giro de divisas para la contratación de los servicios, pide el nombre, pasaporte y nacionalidad de quienes contratan el paquete.
De esta forma, tiene certeza de quiénes efectivamente estarán viajando y su nacionalidad. Así, el organismo puede discriminar entre las compras efectuadas por argentinos y las que realizan pasajeros de otras nacionalidades.
En el caso de que un paquete o pasaje sea comprado por un extranjero, la agencia de turismo ya no podrá acceder al mercado cambiario para girar los dólares al prestador internacional. Además, en la información requerida por AFIP también debe constar la nueva información exigida la fecha de la compra de los pasajes, la fecha del viaje y, por ende, la anticipación con la que fueron adquiridos.
La ofensiva sobre el turismo comenzó hace diez días, con fuertes operativos del Banco Central sobre las agencias de turismo. Los inspectores de la entidad que preside Mercedes Marcó del Pont siguen recabando los datos de los pasajes contratados en los últimos meses y luego los cruzan con Migraciones.
De hecho, la entidad repartió cartas a quienes detectó comprando dólares para turismo para un viaje que en realidad no se efectuó. Y le dio un plazo de cinco días para vender las divisas por el mercado cambiario oficial. De lo contrario, quedarán suspendidos para operar en el mercado y quedarían expuestos a la aplicación de la ley penal cambiaria.
Hace dos semanas se prohibió la contratación de pasajes aéreos en dólares, por lo que sólo pueden ser emitidos en moneda local.
Pero además la AFIP redactó un proyecto para cargar el 15% en concepto de adelanto de Ganancias o Bienes Personales, tanto para la compra de paquetes al exterior, como de pasajes.
FUENTE: iProfesional.com