En medio de una serie de anuncios económicos con los que se buscará reactivar sectores golpeados de la economía, se intentará relanzar al fallido Cedin. El instrumento con el que el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, creyó poder reemplazar al dólar y derrotar al mercado cambiario paralelo volvería hoy con modificaciones: pagaría comisión a los bancos que los operen para incentivar la participación de las entidades financieras.
Entre la serie de anuncios se esperan también se cuenta la inyección de dinero del Tesoro al alicaído sector de la construcción, que perdió 15.000 puestos de trabajo por la recesión.
Tras los roces de la semana pasada entre los bancos y el Gobierno resultado del intento trunco de Jorge Brito, titular del Macro, por intervenir en el conflicto entre el país y los fondos buitre, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, tiene pensado ofrecer como un modesto negocio una operatoria que las entidades han venido desdeñando desde su creación.
Capitanich tomó la idea que le llevaron dos semanas atrás la Cámara de la Industria Inmobiliaria (CIA), el Colegio de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad y el Colegio de Escribanos de la Ciudad. En la reunión, los representantes del sector inmobiliario se quejaron porque los bancos no impulsan el uso del Cedin y pensaron en ofrecer alguna forma de comisión para incentivarlos.
Según el empresario Armario Pepe «el Cedin fracasó» porque no fue utilizado de manera masiva y destacó que ya le habían manifestado a funcionarios de la Casa Rosada, con los que se reunieron por el derrumbe de la actividad inmobiliaria.
«Si no funcionó modifiquemos la operatoria para que sea más ágil y tenga más transparencia al comprador. Necesitamos una herramienta para poder hacer operaciones», manifestó.
Fuentes cercanas a las conversaciones señalaron que, en principio, serían 2 puntos porcentuales los que quedarían en manos de los bancos, pero no lograron dar una cifra firme.
El Certificado de Inversión Inmobiliaria (Cedin) fue un instrumento lanzado en mayo de 2013, cuando se intentó un masivo blanqueo de divisas que tuvo muy poco éxito.
Prorrogado hasta septiembre próximo, el blanqueo acumula suscripciones de Cedines por más de u$s 800 millones, de los cuales u$s 500 millones ya fueron sacados de circulación.
El Cedin es un certificado de exteriorización de divisas no declaradas que estaba pensado para facilitar operaciones inmobiliarias. Un tenedor de dólares en negro que quisiera usarlos para una compra podría canjear sus divisas por ese certificado y entregarlo como forma de pago para que el vendedor, automáticamente, lo cambiara por dólares.
Moreno también pensó que se generaría un mercado secundario de Cedines que reemplazaría al dólar paralelo, pero la operatoria nunca despegó.
El Colegio de Escribanos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires informó que en junio pasado se concretaron 3.154 compraventas en le Ciudad, una suba del 19,6% respecto a mismo mes del año pasado.
El acumulado del año da una caída del 1,98% interanual, pero las caídas actuales no alcanzan para describir el estado del sector. En comparación con junio de 2011, antes del cepo cambiario, la cantidad de escrituras se redujo 45% (fueron 5.746 en aquel mes).
FUENTE: iProfesional.com