Los habilitan a operar como agencias para sacar mercado a los «arbolitos» y los billetes falsos; podrán instalarse en restaurantes
Hoteles y agencias de alquiler de autos o de turismo, entre otras, quedaron desde ayer habilitadas para sumarse a la operación de cambios de monedas, al aprobar el directorio del Banco Central (BCRA) una reforma para tratar de quitarle clientes al mercado ilegal de divisas, ampliando la disponibilidad de ventanillas por las que se pueden operar divisas.
El objetivo es facilitarles las transacciones, «en particular a los turistas que visitan el país», según señaló la entidad en un comunicado, a partir de eliminar «restricciones innecesarias en el actual contexto de libertad cambiaria».
Para lograrlo, flexibilizó fuertemente los requisitos para operar en el primer nivel del mercado: el de las agencias de cambios, diseñadas para actuar a nivel minorista y, por lo mismo, imposibilitadas de hacer transferencias al exterior (algo habilitado sólo a casas de cambio o bancos).
Por caso, les redujo de 6 millones de pesos a 500.000 pesos el capital mínimo exigido para operar, y de 500.000 a 100.000 pesos el piso de garantías a depositar. Y si bien mantiene vigente la obligación de pedir autorización al BCRA para iniciar su actividad (tanto en el caso de casas como de agencias), dispuso que no deberán esperar la habilitación de la autoridad monetaria para abrir sucursales, sino sólo informarlo».
El nuevo marco normativo incluso autoriza, entre otras cosas, a los bancos ser dueños de sus propias casas de cambio, a través de una empresa controlada. Esto es para que puedan generar dependencias, que funcionen fuera del horario bancario tradicional.
Una poda, por las buenas
La reforma busca generalizar las opciones para operar dólares, en un intento por restarle espacio al mercado negro de divisas y acotar aun más la actividad de los «arbolitos», que aún hoy abundan, por caso, en el microcentro porteño.
Según estadísticas del mercado, uno de cada 10 billetes que se operan en ese segmento de negocios son falsos y, mayormente, ingresados al país desde países limítrofes. El punto es que muchos de los que terminan negociando billetes en «cuevas» o en la calle no necesariamente es porque operen con dinero no declarado, sino porque encuentran demasiada rigidez en los horarios con que opera la plaza oficial o pocos puntos de atención que operen fuera de esos límites.
La norma les permite a todas las empresas vinculadas al turismo (hoteles, agencias de viaje y de alquiler de autos, restaurantes, entre otras) realizar operaciones cambiarias de manera independiente y por su cuenta.
«Las empresas vinculadas al turismo, a su vez, tendrán la posibilidad de hacer operaciones cambiarias de manera independiente», amplió el comunicado del Banco Central.
La decisión mejorará el proceso de cambio de divisas, dijo Aldo Elías, presidente de la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina, a la agencia Reuters. «Salir a hacer cambio de divisas en la calle no es seguro ni claro», añadió el empresario.
10%
Billetes dudosos
Es el porcentaje de los billetes operados en el mercado negro y entre los llamados «arbolitos» que, según estadísticas del mercado, son falsos
FUENTE: lanación.com.ar