El organismo que conduce Echegaray auditará la adquisición de divisas en un intento de reducir el mercado cambiario informal y la fuga de capitales. Los particulares y empresas que demanden billetes verdes deberán explicar la finalidad de la operación. Prevén un encarecimiento del dólar paralelo
Por Federico Mc Dougall.
Luego de inundar la «city» porteña con inspectores con el objetivo de controlar la compra de dólares -especialmente las operaciones realizadas en las «cuevas»- la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) dio un paso más: a partir de este lunes, toda compra de divisas estadounidenses por parte de particulares o empresas deberá contar con la autorización previa del organismo.
«Hemos detectado más de un centenar de CUIT y CUIL cuyos ingresos no se condicen con los dólares que quieren comprar. Por eso, desde el lunes, el que adquiera divisas extranjeras será automáticamente auditado por la AFIP, entidad que avalará la compra», disparó el ministro de Economía, Amado Boudou.
El funcionario aseguró que «aquellos que quieran comprar dólares podrán seguir haciéndolo, con los mismos límites que rigen hasta ahora». Y añadió que la «única diferencia es que ahora en la pantalla de la casa de cambio o del banco habrá un aplicativo de AFIP, con el cual se validará la operación».
El ministro agregó que, en caso de que no estuviera disponible el cruce de información por cuestiones de infraestructura del banco, se verificará la capacidad contributiva del interesado con el recibo de sueldo.
En otras palabras, la AFIP será quien convalide que las personas o empresas que adquieran divisas en el mercado cambiario cuenten los fondos correspondientes para hacerlo, y «así terminar con el mercado en negro», anunció Boudou.
Pero hay más: un punto clave de la medida es que el organismo exigirá que el comprador explique los motivos por los cuales necesita hacerse de esas divisas. Es decir, si es para realizar viajes al exterior, proyectos de inversión, o -en caso de que sea una empresa- para operaciones de importación.
De este modo, si la compra no se puede justificar para cualquiera de esos fines, la AFIP directamente podría no autorizarla y cancelarla.
Cómo funcionará el nuevo semáforo cambiario
De acuerdo con la información adelantada por el ministro de Economía, da toda la sensación que a partir del lunes próximo los compradores -al igual que en la Aduana- se enfrentarán a un «semáforo» que les dirá si pueden comprar dólares o no.
Puntualmente, la resolución 3210 confeccionada por la AFIP y el Ministerio de Economía que será oficializada el próximo lunes establecerá que los bancos y las casas de cambio tendrán que utilizar un nuevo «software» que les permitirá contar con la siguiente información online:
- Las últimas adquisiciones de divisas del futuro comprador;
- Acceso a los principales indicadores de la «capacidad» contributiva del individuo. En otras palabras, el fisco nacional verificará si sus ingresos le permiten adquirir la cantidad de dólares requerida.
Por lo tanto, desde el próximo lunes, los futuros compradores deberán informar su Clave Única de Identificación Tributaria o Laboral (CUIT o CUIL) y el motivo de la compra para así iniciar la operación. Este flamante requisito se suma al resto de la documentación que ya se requería:
- DNI y fotocopia del mismo;
- Una boleta de servicio a su nombre en el que figure la misma dirección que aparece en el documento;
- Fotocopia del recibo de sueldo o constancia del Monotributo con el comprobante que indique que su pago está al día.
Una vez presentada la documentación, el trámite promete ser simple. El futuro comprador tendrá que indicarle al cajero -del banco o la casa de cambio- el motivo de la compra, que podrá ser:
- La adquisición de un departamento.
- La realización de un viaje.
- Sin fines específicos (ahorro)
Ante la respuesta, el cajero ingresará los datos en una pantalla que estará conectada en tiempo real con las bases de datos de la AFIP.
En cuestión de segundos, el organismo a cargo de Ricardo Echegaray autorizará o denegará la operación. Para ello, el flamante «sistema aplicativo online» de la AFIP comprobará si el comprador tiene respaldo patrimonial y de ingresos para llevar adelante la compra de dólares.
Puntualmente, la AFIP cuenta con varios indicadores del nivel de vida de los contribuyentes. Entre ellos se destacan:
- Consumos en tarjetas de crédito y débito.
- Movimientos bancarios.
- Declaraciones patrimoniales.
- Pago de cuotas de colegios privados.
- Inversiones en fideicomisos.
Además, el sistema tendrá cargadas todas las operaciones de compra de divisas del individuo en cuestión. Por lo tanto, la AFIP sabrá cuántos dólares lleva acumulados el interesado.
Hasta ayer, los ávidos compradores podían hacer una recorrida por varias casas de cambio o bancos porque no había una base de datos unificada donde se registraban todas las compras.
De esta manera, se busca asfixiar o expulsar del mercado formal a los «coleros» o a quienes se manejan con dinero no declarado.
Conocida la flamante avanzada, Alberto Romero, consultor tributario aseguró que «la AFIP cuenta con una amplia base de datos que permitirá evaluar la futura compra a realizar».
«Sería saludable que el control sea rápido y que no genere una ´burocracia´ extra que complique la operación a realizar», agregó Romero.
Si bien afirmó que «es por demás valorable el objetivo de expulsar del mercado formal a los ´coleros´ o a quienes se manejan con dinero en negro», el especialista aseguró que «la compraventa de dólares siempre ha sido un tema sensible en el país».
«Sería conveniente que la nueva avanzada de la AFIP se implemente con los cuidados necesarios para así evitar efectos no deseados», concluyó Romero.
Una medida que genera alerta
En un viernes cargado de rumores de todo tipo en la City porteña, funcionarios de Economía, el Banco Central y la AFIP mantuvieron una maratónica reunión para definir los pasos a seguir.
En ese marco fue que se decidió comenzar a auditar, desde el próximo lunes, a toda persona física o jurídica que se acerque a una entidad en busca de dólares.
Tal como viene informando iProfesional.com, la psicosis por el billete verde se debe, principalmente, a que éste quedó barato por las subas salariales y la inflación. Y esto hace que muchos argentinos perciban que se dará un lento y progresivo ajuste del tipo de cambio.
Sin embargo, uno de los puntos que más está preocupando al Gobierno es que, para no caer en la lupa oficial, muchos ahorristas e inversores están dispuestos a pagar un sobreprecio (0,23 centavos por dólar).
Este interés es el que genera que el «blue» cotice a $4,50 (frente a los $4,27 del valor pizarra).
Reconociendo este panorama, el ministro Boudou aseguró que «lo que buscamos es que todas las operaciones se canalicen a través del mercado formal».
El problema es que algunos analistas deslizan la posibilidad de que esta medida genere que pase a haber un precio para los importadores, turistas o quienes invierten en ladrillos, y otro, para aquellos que lo buscan como forma de cobertura, en momentos en que las perspectivas hablan de un paulatino encarecimiento del billete verde.
De este modo, la visión de los expertos es que se acentuará la brecha entre el mercado formal y el paralelo.
«Hay que estar atentos. Lo que podría pasar de ahora en más es que el dólar blue se dispare, porque aumentará la demanda en un contexto de fuertes controles«, alertó off the record un corredor de la city.
Para saber más sobre cómo funciona el negocio de los «coleros» y la operatoria de las «cuevas», haga clic aquí.
FUENTE: iProfesional.com